Verano: Cómo evitar resfriados

¿Sabías que es común sufrir resfriados durante el verano? Descubre cómo prevenirlos y proteger la salud de tus colaboradores en esta temporada. El verano es sinónimo de calor, vacaciones y actividades al aire libre, pero también puede ser una época en la que muchas personas sufren de resfriados. Aunque generalmente asociamos estos malestares con el frío invierno, el calor excesivo, los cambios bruscos de temperatura y otros factores durante la temporada estival pueden hacer que el sistema inmunológico se debilite, aumentando el riesgo de enfermarse. Los resfriados no solo afectan la calidad de vida, sino que también tienen un impacto directo en el ámbito laboral, ya que los empleados pueden ausentarse debido a malestares como congestión nasal, dolor de garganta y tos. Prevenir estos resfriados en el entorno laboral es fundamental para asegurar la productividad y el bienestar de los colaboradores. Aquí, exploraremos cómo evitar los resfriados durante el verano y qué medidas pueden tomar las empresas para fomentar un ambiente saludable.  

¿Por qué los resfriados ocurren en verano?

Es cierto que el calor veraniego debería alejar los resfriados, pero hay varias razones por las cuales los resfriados son comunes durante esta temporada. A continuación, exploramos algunos factores que contribuyen a este fenómeno:

• Cambios bruscos de temperatura

Durante el verano, las personas suelen moverse entre lugares con aire acondicionado y espacios al aire libre muy calurosos. Este contraste térmico puede debilitar el sistema inmunológico, favoreciendo la aparición de virus que causan resfriados.

• Aire acondicionado

El uso constante del aire acondicionado en oficinas, vehículos y hogares es común durante el verano. Aunque proporciona alivio del calor, el aire acondicionado puede resecar las vías respiratorias y reducir la capacidad del sistema inmunológico para defenderse de los virus.

• Exposición a personas infectadas

En verano, las personas tienden a asistir a reuniones sociales, eventos o viajes, lo que aumenta la probabilidad de entrar en contacto con alguien que tenga un resfriado. El virus del resfriado se transmite fácilmente a través del aire, gotas de saliva o superficies contaminadas.

• Deshidratación

El calor del verano puede llevar a la deshidratación, lo que afecta negativamente el funcionamiento del sistema inmunológico. La falta de agua en el cuerpo dificulta las funciones defensivas contra infecciones, aumentando la susceptibilidad a resfriados.

• Estrés y fatiga

Durante las vacaciones o épocas de trabajo intensivo, las personas a veces alteran sus horarios de descanso, lo que puede llevar a un debilitamiento general del cuerpo. La fatiga y el estrés también afectan el sistema inmunológico, lo que facilita que el cuerpo sea vulnerable a virus y bacterias.  

Medidas preventivas para evitar resfriados en verano

La prevención de los resfriados no solo depende de evitar el contacto con personas enfermas, sino de mantener el cuerpo saludable y equilibrado en todas las condiciones posibles. A continuación, se detallan algunas medidas que tanto empleados como empleadores pueden seguir para reducir la probabilidad de resfriarse durante el verano:

• Mantener una hidratación adecuada

Durante los meses calurosos, es fundamental consumir agua constantemente para mantener las vías respiratorias hidratadas y el cuerpo en funcionamiento óptimo. Asegúrate de que los empleados tengan acceso fácil a agua potable durante su jornada laboral. Esto ayudará a mantener su sistema inmunológico fuerte.

• Evitar cambios bruscos de temperatura

Fomentar la adaptación gradual entre espacios climatizados y exteriores es clave. Si los trabajadores deben entrar y salir de áreas con aire acondicionado, se recomienda permitirles tiempo para que se aclimaten, evitando cambios bruscos que puedan afectar su salud.

• Limpiar y desinfectar los espacios de trabajo

La higiene es fundamental para evitar la transmisión de virus. Durante el verano, las empresas deben intensificar la limpieza de los espacios comunes, como escritorios, baños y áreas de descanso. Esto reduce las probabilidades de contagio por contacto directo con superficies contaminadas.

• Promover el uso de mascarillas en ambientes cerrados

Aunque el uso de mascarillas es más común en invierno, es recomendable que se utilicen también en espacios cerrados donde hay muchas personas. Si un colaborador está resfriado, esto ayuda a evitar la propagación del virus.

• Fomentar el descanso adecuado

Un buen descanso es esencial para mantener el sistema inmunológico fuerte. Las empresas deben asegurarse de que sus empleados no trabajen en exceso y promuevan descansos regulares para evitar la fatiga. Además, se deben ofrecer vacaciones en los momentos apropiados para asegurar que los colaboradores puedan relajarse y recargar energías.

• Uso moderado del aire acondicionado

Si bien el aire acondicionado es necesario para combatir el calor, su uso excesivo puede afectar la salud. En las oficinas, se recomienda mantener una temperatura moderada (alrededor de 24°C) para evitar los efectos negativos sobre las vías respiratorias.

• Fortalecer el sistema inmunológico con una dieta balanceada

Las frutas y verduras ricas en vitaminas, especialmente la vitamina C, ayudan a fortalecer el sistema inmunológico. Los empleados deben recibir información sobre la importancia de una dieta saludable y balanceada para prevenir resfriados y otras enfermedades. Es recomendable ofrecer snacks saludables en el ambiente laboral.

• Promover actividades al aire libre con precaución

Las actividades al aire libre durante el verano son beneficiosas para la salud, pero deben realizarse con precaución. Fomentar caminatas, ejercicio o actividades recreativas puede mejorar la circulación y la salud general. Sin embargo, se debe evitar la sobreexposición al calor para prevenir golpes de calor o deshidratación.

• Evitar la exposición a personas enfermas

En un entorno laboral, es importante que los empleados con síntomas de resfriado se queden en casa hasta que se recuperen completamente. De esta manera, se evitará el contagio a otros trabajadores, lo que reducirá las ausencias laborales y la propagación de los virus.  

Conclusión

Aunque el verano puede parecer una época para descansar y disfrutar, también puede presentar riesgos para la salud de los colaboradores si no se toman las precauciones necesarias. La prevención de los resfriados en esta temporada es crucial para garantizar el bienestar de los empleados y mantener la productividad en el lugar de trabajo. Desde una adecuada hidratación hasta medidas de higiene y descanso, son muchas las acciones que las empresas pueden tomar para crear un ambiente saludable durante los meses calurosos. Contáctanos y te ayudaremos a desarrollar una estrategia personalizada.  

Fuentes

• https://www.cdc.gov/nceh/publications/factsheets/airconditioner.htm  
• https://www.who.int/news-room/fact-sheets/detail/common-cold  
• https://www.health.com/how-to-avoid-summer-colds-4802454